Optimus Secret Show lleno un avion con un centenar de fans para una experiencia única en Luxemburgo
«Espectacular», «Magnífico», «El mejor dia de mi vida». Fue la manera emotiva en que los cerca de cien fans de Tokio Hotel clasificaron el Optimus Secret Show que los llevo a Luxemburgo para asistir a a la previa de la gira de la banda alemana, que arrancara el dia 22 en aquel pais. Durante cerca de media hora, asistieron a un concierto exclusivo y pudieron ser los primeros en la produccion del espectaculo de la presentacion del nuevo disco «Humanoid», que el vocalista Bill Kaulitz dijo posteriromente a la prensa que es el mejor para la banda.
Entró en una fase marcada de la industrial, el escenario parece dominado por una gigantesca esfera de donde salen luces antes de abrirse y mostrarnos al baterista Gustav Schäfer y el habitualmente exhuberante vocalista de la banda con un estilo rockabilly, de pelo marcado con gel y distribuyendo sonrisas para la mayoria de las niñas que deliraban frente al escenario. Especialmente para ellas – solo habia dos hombres entre los fans – la emocion les debilitaba las piernas, pero no los gritos de histeris que fueron creciendo a lo largo del dia y que ahora tienen una razon para existir. «Creo que estoy soñando», se escucha, con las manos tapando la boca y los ojos llorosos. Las emociones estuvieron a flor de piel.
Habia primera fila para toda la gente, menos para el aficionado que decidio correr constantemente de una punta a otra del estadio con la bandera de portugal en alto y un par de antenas atraves del bandolette, captando asi la atencion de los miembros de la banda, y en especial de Bill que parecia algo hipnotizado por esta actitud. Catarina exlicaba mas tarde que esta era una estrategia suya para hacerse notar, estando visiblemente satisfecha por el resultado: «Él me siguio siempre!».
